"Té perdí, sin tenerte nunca conmigo.
Sin haberte hecho estallar de pasión y de deseo.
Te perdí, sin que me dieras un beso.
Sin que me hicieras tu mujer.
Sin que me quitaras las bragas y el sosten.
Te perdí, sin haber saboreado tu olor corporal.
Sin que me lamieras las caderas.
Sin que me rosaras con tu barba el rostro.
Te perdí, sin saber de que color son tus mejillas.
Sin saber si tus piernas estaban bien torneadas.
Sin que supieras de que color son mis cabellos.
Te perdí, sin que supieras que siempre te llevaré dentro de
mis entrañas.
Sin poder saborear mi silencio.
Sin poder olfatear mi espalda.
Te perdí, sin saber que se siente meterse a la cama contigo.
Sin saber que se sienten tus sabanas al contacto de mi piel.
Sin saber a que saben tus caderas.
Te perdí, sin que te enteraras que te deseaba tanto.
Sin que supieras que me moría de amor por ti.
Sin que supieras lo loca que estaba por ti.
Te perdí, sin haberte conocido profundamente.
Sin desear que ardiéramos juntos en mi cama.
Sin oler tu ropa interior.
Te perdí, sin saber de que color eran tus labios.
Sin saber como se sentía meterse a la alberca contigo desnudos.
Sin que me amaras en silencio.
Y te perdí, sin haberte gritado lo mucho que significas para mi".
- Té y Letras
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